Agripina se presenta ante nosotros posando para que podamos apreciar cada detalle de su tipín: tetitas en flor, culazo perfecto y una carita muy dulce. Rostro que se torna lujurioso en cuanto se la mete en la boca, ¡cómo traga la cochina! En plena acción es una verdadera máquina; una chica muy manejable, frenética y energética... toda una diosa para terminar corriéndome en su boca.