Con Martita acariciándose su clítoris a un palmo de la cámara arranca este nuevo Guarreridas. Le pedí que se tumbara completamente en la cama para poder manosearle sus bonitas y firmes tetas, bajé mi mano hasta su coñito y le hice una paja metiéndole los dedos hasta el fondo para ponerla cerdísima! Le acerqué mi polla hasta su boca, y ella empezó a comerme el rabo como los ángeles... qué forma de chupar!!! Empezamos a follar con Martita cabalgando sobre mi polla y levantó un poco su culito para que pudiera grabar perfectamente cómo me la estaba follando! Lo mejor vino en el cuatro patas, me encanta embestir a una tía y cogerla por los hombros para apretarle con fuerza, o incluso del pelo. Fue un polvazo que acabó con la boca de Martita llena de lefa!